El proceso del LAC fue generado en los años 70.
Este método surgió como resultado de las crecientes limitaciones para
establecer la capacidad de carga turística y recreativa. Más específicamente, a
la poca aceptabilidad de los planes de manejo de las áreas forestales de los
EEUU por parte de los administradores y el público. Fue así que las autoridades
decidieron que era necesaria una nueva estrategia de planeamiento, teniendo en
cuenta el mejoramiento de los aspectos técnicos y la inclusión del público en
el proceso. Fue entonces organizado un grupo de trabajo con diferentes actores
del público así como administradores y científicos. La primera aplicación del
LAC comenzó a mediados de 1980. Fue enfocado en el Bob Marshall Wilderness
Complex (tres áreas naturales contiguas: Bob Marshall, Great Bear, y Scapegoal
) al noroeste del estado de Montana, EEUU.
El proceso y aplicación del LAC en esta área fue
completado en 1987. Luego de esta primera aplicación otros parques de los
Estados Unidos adoptaron este proceso, como el Selway-Bitterroot; el South
Fork, un área en críticas condiciones, y así sucesivamente. Para el año 1990 al
menos 23 parques incluyeron como plan de manejo el método LAC. Para el año 1994
este número creció a 50 solamente dentro del US National Forest System.
Posteriormente comenzó a ser utilizado fuera de los Estados Unidos, primero en
Australia y luego en muchos otros países.
Podemos decir que el método del LAC es el más
difundido como método de manejo y monitoreo para Áreas Naturales Protegidas.
Este método hace mayor énfasis en la planificación más que en los números que
provienen de los cálculos de Capacidad de Carga. El enfoque del LAC se
concentra en establecer límites medibles a los cambios inducidos por el hombre
en las condiciones naturales y sociales del área y en definir estrategias
apropiadas de manejo para mantener y/o restaurar tales condiciones: establecer
los limites de cambio aceptable. Se lleva a cabo de una manera consensuada a
través de la cooperación entre todos los actores involucrados en la actividad
turística, tanto del sector publico como privado. De esta manera el desarrollo
del proceso es verdaderamente participativo y representativo de los diferentes
sectores implicados en la actividad turística del Area Natural Protegida.
En síntesis el proceso del LAC es sistemático,
explícito, defendible, racional, tiene en cuenta la participación pública y es
pertinente a casos donde hay conflicto entre objetivos de manejo.
Pasos del LAC
- Identificación
y análisis de los valores del area protegida .
- Descubrir
y definir las clases de oportunidades de experiencia turística y de
recreación (COE)
- Seleccionar
indicadores de los recursos naturales y condiciones sociales.
- Realizar
un inventario de los indicadores de los recursos naturales y sociales
existentes.
- Determinar
estándares para los indicadores sociales y de recursos naturales
para cada COE.
- Identificar
COE deseadas que reflejen los problemas y temas de interés y las
condiciones sociales y de recursos naturales existentes.
- Identificar
acciones de manejo para cada COE.
- Evaluar
y seleccionar una alternativa de manejo para cada COE.
- Formular
e implementar un protocolo de acciones de manejo y plan de monitoreo
de las condiciones
En el primer paso se definen los valores de área protegida.
Es decir las cualidades que merecen ser conocidas, sentidas queridas o deseadas
como cualidades apreciadas del área natural protegida como expresión de un
consenso social y componente de la cultura local.
En el segundo paso se definen las COE existentes y en
el tercero se seleccionan indicadores de los recursos naturales y condiciones
sociales que sean fácilmente identificados y medibles para cada COE.
En el cuarto paso se realiza un inventario de los
recursos naturales y las condiciones sociales existentes guiados por los
indicadores seleccionados en el paso tres, o sea luego de llegar a un acuerdo
sobre qué atributos naturales y condiciones sociales son importantes y por que.
Estos datos luego serán representados en mapas a través del sistema GIS
(sistema de información geográfica).
En el quinto paso se determinan estándares para los
indicadores sociales y recursos naturales para cada COE. Estos estándares
sirven para definir los límites de cambio aceptable. Son el límite máximo
permitido para cada COE.
En el sexto paso se pasa a identificar las COE
deseadas teniendo en cuenta los productos del primer y el cuarto paso. Es un
paso esencial del proceso del LAC ya que los pasos siguientes dependen
totalmente de este.
El séptimo paso tiene en cuenta las acciones de manejo
para cada COE para llevar las condiciones existentes a las deseadas.
El siguiente paso es evaluar las alternativas de
manejo del paso anterior y seleccionar las alternativas adecuadas o preferidas.
El noveno y último paso es formular e implementar un
protocolo de acciones de manejo y un plan de monitoreo de las
condiciones.
LA CAPACIDAD DE CARGA PARA TURISMO Y
RECREACIÓN
Los primeros métodos elaborados para
abordar los impactos del turismo se basaron en el concepto de la capacidad de
carga. Este concepto tiene sus raíces en el manejo de zonas áridas, donde la
capacidad de carga es definida como el número máximo o densidad de animales que
una unidad determinada de campo puede tolerar en forma sustentable sin la
destrucción del recurso base (Mann, C., 2003). El propósito de la capacidad de
carga es definir el nivel de uso que un área puede tolerar.
Se considera que el uso de límites numéricos estrictos para los
visitantes constituye una solución simple y directa para mitigar los
impactos del turismo. Sin embargo, estudiosos y administradores
familiarizados con las dinámicas de los impactos causados por los visitantes
(Stankey y McCool, 1972; Lindberg et. al., 1997; Borrie et. al., 1998)
sostienen que no existe una relación clara y precisa entre el número de
visitantes y los impactos, y que hay muchos factores que influyen en el lugar.
Además, es posible aplicar diferentes estrategias que permiten que aumente el
número de visitantes y al mismo tiempo disminuyan las repercusiones negativas.
Una buena gestión del acceso de los visitantes disminuye los posibles
cambios inducidos por el hombre en las condiciones de un área natural
protegida.
Los problemas relacionados con una estimación
numérica y su aplicación práctica en áreas naturales protegidas generaron la
creación de métodos que tuvieran en cuenta el manejo de los impactos producidos
por los visitantes y también las oportunidades de turismo y recreación
ofrecidas, además de la conservación y manejo de los recursos naturales.
Por ende, un enfoque estrictamente cuantitativo aplicado dentro del marco de
los análisis de Capacidad de Carga, no es suficiente y tampoco apropiado; hoy
en día se dispone de métodos más sensibles y específicos al l turismo y la
recreación.